Cuando estamos pasando una situación díficil y necesitamos la ayuda de Dios; la palabra de Dios dice que debemos poner nuestras cargas en el Señor y rogar con clamor por su ayuda.
Durante tiempos de necesidad y crisis es común sentirse solos y abandonados, pero nosotros los cristianos pertenecesmos a una familia muy grande que nos puede apoyar y ayudar aún en la crisis más profunda.